martes, 30 de mayo de 2017

INSANA COMPETENCIA

No sé porqué creí que debía ser la mejor en algo, como si necesitase reafirmarme, encontrar mi lugar en el mundo, o alguna idiotez por el estilo, sí, idiotez, porqué no hay nada más absurdo y más frustrante que perseguir un imposible. No hablo de utopías, las adoro, y a demás las encuentro necesarias. ¿¿Pero crecer y vivir con la presión de pretender ser la mejor?? Un esfuerzo inútil. Siempre hay alguien que te supera, tarde o temprano, a no ser que realmente seas un genio, y las posibilidades de que así sea, admitámoslo, son escasas.

Yo dibujaba bien y tenía una letra bonita, pero no tardé en tropezar con un par de compañeros que lo hacían mejor que yo. No pasa nada. ¿O si? Me sentía en deuda con quienes creían en mi potencial, en mis habilidades, en mis virtudes. Creía tener la obligación de responder tal y como se esperaba de mí, por no defraudar, por no sentirme mal. Y de pronto, que otras personas pusieran en duda mi proclamada superioridad, me llevaba a tener que competir, a multiplicar esfuerzos, a sentirme vulnerable e insegura.

Años de universidad acabaron con mi don de la belleza caligráfica, me quedé sin trono (alivio total). Pero como soy una incauta hice algo más...

Un pastel que me salió de... mmm... ¡increíble! Oye, pues nunca más, los siguientes cien o doscientos pasteles que he hecho en mi vida han sido de mediocres para abajo. ¿Qué pasa?, que tuve la mala suerte de hacer algo excepcionalmente bien en un momento en el que se le dio mucho bombo, y claro, cría fama y échate a dormir: aún sin haber vuelto a entrar en la cocina yo era la de los pasteles deliciosos. ¡Qué presión! Ahora solo tenía dos alternativas: no hacer ningún pastel (oficial) jamás de los jamases, o desear no haber hecho nunca ese primer dichoso pastel.

Cuando me vi despojada de mis supuestos dones, de mis facetas sobresalientes, fue un poco raro. Es como si alguien llega y te aparta con la mano hacia un lado y te deja ahí para que observes. Ya no era la "secretaria" de todos los proyectos, ni a la que pedían que dibujase en murales, folios y libretas. ¡Me habían condenado a ser una del montón! Otras personas ocupaban el lugar al que antes me habían alzado a mí, ahora yo les miraría desde abajo y yo no sabía estar más que arriba...

Regalitos de Navidad (a buenas horas los enseño)

El detalle es lo que importa

Me defiendo y con eso me basta

Ahora pongo más cariño y buena intención y menos presión sobre mi misma
Tal vez eso ayudó a que dejase de importarme tratar de agradar, ¿para qué? La mayoría de las veces lo haces para gente que no te importa en absoluto, o que a penas conoces. Ahora piensa, ¿qué conseguimos alabando desmesuradamente las cualidades de los niños y de las niñas?

P.D.: Como todo lo que escribo tiene mucho de autobiográfico, pero en este caso me he valido de lo anecdótico de mi experiencia personal para llevarlo al extremo y sacar a relucir un tema que me ha venido a la mente.

Hace poco leía un artículo en el catorze.cat sobre la frivolidad: El síntoma de la felicidad. Esta es mi frivolidad, pensar en temas más amables cuando lo que me preocupan son cosas demasiado serias.

domingo, 21 de mayo de 2017

GOLOSINAS LITERARIAS

Soy los libros que leo, los paisajes que me emocionan, la música que me acompaña... Por eso estoy a medio hacer, incompleta, en proceso, siempre en construcción, llenándome y vertiéndome, vaciándome un poco, en un continuo rehacer.

Este fin de semana me he alimentado de sol y libros y de taquitos de sandía, de las miradas pícaras de Juno y de la complicidad de Miguel. Ahora que se van agotando las horas y apilo papeles, me siento con más ganas de vacaciones que nunca, quiero hacer esto y esto y esto otro. Todo llega, dicen.

Ya os comenté que me había autorregalado algunas Chucherías de arte, me lo pedía el cuerpo ;) Y araño los momentos tranquilos que los días me permiten para ir decubriéndolas poco a poco. Son pequeñas joyas en mis manos, tan preciosas y poéticas.




Tengo 10 mini libritos, del lote 2 de Cuadernos singulares, podría haber elegido cualquier otro y seguramente me hubiese gustado igual. Tienen un poder inspirador alucinante, cada vez que abro una de esas cajitas de cartón me entran ganas de escribir, de leer, de crear... 

Si os gustan los libros de artista, la ilustración, la poesía, el arte, el intimismo, las cosas únicas... os los recomiendo: Chucherías de arte


Tengo otro regalo en mente, pero aún no me he decidido, tampoco quiero ser una caprichosa. Se trata de algunos de los tesoros de La indolente, una editorial independiente que crea unos libritos que enamoran solo con verlos. Yo le echado el ojo a uno de ellos, pero es imposible decidirse por uno!

Es este, de Verónica Mora, y se titula:
Me muero de pena


Además, me está costando resistirme a su fanzine trimestral 
Lo bello duele


Para acabar, también os quería hablar de otro descubrimiento:
Sons of Gutenberg
Librería+Galería+Teatro
Otro lugar donde encontrar piezas únicas.


Feliz final de domingo, no tengáis pena que cada semana trae uno nuevo y cada lunes algo bueno, seguro.

domingo, 14 de mayo de 2017

MIEDO A TODO

Cuántas veces habré presenciado la escena: un niño con ganas de jugar, de descubrir y de moverse en libertad y un adulto pisándole los talones y recordándole a cada paso que el mundo está lleno de obstáculos, retos imposibles, trabas a evitar, dificultades, impedimentos... Diciéndole que él no sabe, no puede o no debe realizar según que acciones, porque pueden suponer un peligro (o riesgo de él), por mínima que sea la probabilidad.



- ¡Cuidado que te vas a caer!
- ¡Cuidado no corras!
- ¡Cuidado ves más despacio!
- ¡Cuidado un escalón!
- ¡Cuidado no subas ahí!
- ¡Cuidado que está muy alto!

¿Os imagináis que alguien os diese esos "mensajes de aliento" mientras intentáis asumir un nuevo reto, lograr algo que os entusiasma, o simplemente tratáis de poner a prueba vuestras capacidades?

Muy probablemente desistirías de lo que estáis a punto de hacer, pensaríais que no sois capaces de hacerlo, que es demasiado difícil para vosotros, que es muy peligroso... O, si habéis salido algo rebeldes, os enfadaríais, os empeñaríais en intentarlo de todos modos, o os frustraríais, os sentiríais débiles, sumisos (sí mama no lo volveré a hacer más)...

Lo que no os sentiríais en ningún caso es capaces y seguros: porque lo que, con estos mensajes, no infundimos en ningún caso es ánimo y confianza. Entonces, igual que nos pasa a nosotros cuando un jefe desconfiado nos observa con el ceño fruncido, que cometemos más errores de la cuenta, nos tiembla un poco el pulso, nos volvemos más torpes, dudamos, etc. Imaginad un niño o niña, en pleno desarrollo de sus capacidades.





Los adultos transferimos nuestros miedos a los niños para los que somos referentes 
En su Teoría del Aprendizaje Social o Teoría Social Cognitiva, Albert Bandura (1977) hace mención a la autoeficacia percibida: las creencias que una persona tiene sobre sus propias capacidades. Sus expectativas de eficacia. 
Los niños con una autoeficacia baja tenderán a sentirse indefensos y a rendirse ante un problema u obstáculo. Con todo lo que comporta para su futuro desarrollo crecer con este handicap adquirido.
Los niños con una autoeficacia elevada se sentirán capaces de resolver los problemas que se encuentren, se mostrarán perseverantes y se enfrentaran a las dificultades como desafíos.
Pero no fue Bandura quien me hizo ver la luz, una vez escuché a alguien unas sabias palabras (a parte de "vive y deja vivir", que se la prestaría a más de uno, y de esta otra: "si tus palabras no valen más que el silencio, cierra la boca por favor", versión libre, por supuesto) decía algo así:

Los niños y las niñas tienen derecho a no heredar los miedos de sus padres

Como educadora hace años que eliminé el "cuidado, cuidado" de mi repertorio, por respeto a esos niños que no merecían que les transmitiese mis temores, aunque eso no significa que no les advierta cuando considero que es necesario con un "ves con cuidado con...". Creo que existe una gran diferencia entre ese "¡Ay, ay!" que va acompañado de un tono y de una actitud determinada, que de una vigilancia relajada que advierte solo cuando existe un riesgo real. Conocer en el día a día a los niños es lo que permite saber hasta donde puede llegar sin nuestra intervención directa, por lo tanto, observarlos es primordial.


Con Juno, que la conozco más que a mí misma, tengo muy claro de lo que es capaz y de lo que puede llegar a hacer sin mi ayuda aunque no lo haya hecho jamás. Simplemente estoy cerca, disponible, atenta y la miro con confianza. Cuando creo que corre peligro, entonces actúo, sin asustarla, simplemente le digo que aún no puede hacerlo. 

No le doy una larga explicación, si ella corre por el campo y se acerca a una zona con cristales le advierto que allí no que hay cristales y se puede cortar. Punto. Y dejo que siga corriendo en otra dirección. Si quiere trepar por algún sitio, como sé que tiene un buen dominio en estos casos, estoy cerca por si me necesita y la dejo hacer (no, no soy de ¡venga, tu puedes!, ¡campeona!, ¡muy bien!) no quiero que haga las cosas para impresionarme, ni para recibir un premio o un halago, quiero que haga lo que le hace sentir bien a ella, por eso me gusta mantenerme en un segundo plano, no entorpecer sus exploraciones.

De hecho, en zonas que considero seguras, dejo que se aleje y que se sienta lo más libre posible, y no soy ni negligente ni imprudente, es que quiero lo mejor para ella y para mí lo mejor es que crezca confiando en sus posibilidades.



Pero tengo la sensación de que los adultos de mi entorno tienen muchos miedos con respecto a las capacidades de Juno, tal vez porque no la conocen tan a fondo como yo, y recurren a todos estos mensajes que yo evito: tanto los de alerta como los de ánimo. No ven que si trepa tan bien es porque desde pequeña la hemos dejado intentarlo, que gracias a todo el aprendizaje que lleva recorrido ahora puede, y que sabe perfectamente cuando algo está fuera de su alcance y entonces pide ayuda.

En fin, me gustaría que tuviesen más confianza en mí, que sé cuidar de mi hija y trato de hacerlo con el máximo mimo y respeto. Y a los entrometidos, que no te conocen de nada y te dan lecciones, les diría esas sabias palabras que tan bien me va recordarlas a mí.

¡¡Feliz domingo!!

domingo, 7 de mayo de 2017

CALZADO PARA PIES DESCALZOS

Nuestra niña "pies descalzos" adora sus pies, se los mira, se los toca, juega con ellos... Una de sus habilidades es coger un lápiz con ellos, lo aprendió jugando, experimentando, probando, como se dan los grandes aprendizajes. 

"Pou" fue una de sus primeras palabras, después de "hola", "mama", "papa", porque pie en catalán es "peu" y ella lo pronuncia con la boca pequeña y suena así. Siempre tiene el "pou" en la boca, entre ponerse y quitarse los calcetines y trepar por todas partes, los tiene siempre en danza.




Ya os comenté que decidimos comprarle algún tipo de calzado blandito y flexible para andurrear por ciertos lugares y para ir de vacaciones en Semana Santa pensamos que nos iría muy bien, así que después de sopesar las distintas opciones que ofrece el mercado, nos decantamos por unos escarpines de Decathlon.

Escarpines sin suela
  • Zapatillas primeros pasos de gimnasia infantil babylight
  • Marca: Domyos
  • Información del producto: Validada por una psicomotricista para gimnasia infantil: nada mejor para desarrollar el equilibrio, la motricidad y la coordinación
  • Tallas: números del 20 al 30 (Juno usa un 21)
  • Color: fucsia y azul (¿¿¿y los verdes, naranjas, lilas y amarillos???)
  • Precio 15 € (ahora de oferta a 13€)
Nuestros favoritos.

Escarpines con suela
  • Zapatillas primeros pasos bebé gimnasia ultralight
  • Marca: Domyos
  • Información del producto: Las primeras zapatillas de gimnasia infantil, fáciles de calzar, ayudan a no resbalar
  • Tallas: números del 20 al 28 (Juno usa un 21)
  • Color: rosa chicle y gris asfalto (¿¿¿y los verdes, naranjas, lilas y amarillos???)
  • Precio 10 € (ahora de oferta a 8€)

Ahora ya podemos decir que ha sido un acierto, por varios motivos:
  1. Se la ve cómoda 
  2. Anda bien, corre, sube y baja... Igual que hacía descalza
  3. No le han hecho heridas, ni rojeces: nada
  4. No se le sale el pie por mucho que ande, corra, trepe...
  5. Se los quita fácilmente sola
  6. Transpiran
  7. Se pueden usar solos o con calcetín
  8. Se lavan y se secan rápido
  9. No ocupan apenas espacio
  10. Es una de las opciones más económica

Y aunque, principalmente, me estoy refiriendo al modelo más flexible (sin suela), los que tienen suela son prácticamente tan cómodos y comparten puntos a favor con los primeros. Compramos los dos por si necesitamos en alguna ocasión un calzado que amortice las inclemencias del terreno, en caso de desplazamiento las piedras acaban haciendo daño, para estar jugando con ellas no sería necesario ni usar calzado; se trata de tener opciones.

Comer jamón es compatible a llevar las zapatillas consigo

De cara a vacaciones es una de las cosas que van a ir en la maleta de Juno, y ahora que lo menciono voy a seguir con la lista de la bolsa de viaje. Espero que a alguien le sea útil esta información y nuestra experiencia. 

¡¡Feliz día madres del mundo!! <3<3

sábado, 6 de mayo de 2017

MINI-VACACIONES CON JUNO

¡De nuevo fin de semana! Cuando sientes que te falta tiempo para todo las semanas pasan volando... Ahora andamos preparando nuestras vacaciones de verano, este va a ser el primer viaje en avión, transoceánico, largo y exótico con Juno. Aunque la experiencia me entusiasma, también es cierto que conlleva mucha más responsabilidad y organización que cuando hemos viajado los dos. Así que entre listas y foros de viajes me encuentro la mar de entretenida ;)

Y en un descanso he pasado las fotos de esta semana santa al ordenador, y me ha encantado verlas porque he vuelto a tener esa sensación que me produce viajar con Juno, aunque sea cerca y pocos días, siento que estoy compartiendo con ella vivencias que van a ir formando nuestra historia familiar, que van a constituir nuestros recuerdos comunes... Y a mí, despertar en un lugar nuevo me produce un subidón de adrenalina que me da la vida!

Por este motivo, el título de esta entrada tenía que dedicárselo a ella, porque el lugar no importa tanto como el hecho de adecuarnos a sus necesidades y nuestras ganas de transmitirle nuestra pasión por viajar.


Y precisamente, hace poco hablaba con unas amigas sobre el hecho de viajar, lo hablaba con personas a las que les apasiona tanto como a mí, yo tengo la suerte de tener a mi lado una persona para la que viajar es una necesidad, a la que le fascina descubrir, vivir y aprender de culturas, personas, costumbres distintas, patearse las calles, los caminos, probar todos los platos, captar toda la esencia que se le permite a un forastero, en ocasiones también nos hemos sentido un poco "guiris" aunque tratemos de viajar de otro modo. En fin, cada cual lo vive a su manera. Pero hay a quien no le gusta salir de su zona de confort, quién te dice como si no hablase contigo que quien viaja tan lejos casi siempre desconoce su propio país. Bueno, habrá quién cumpla esta extraña norma, pero por experiencia propia, creo que ambas opciones son perfectamente compatibles, y a los que nos gusta irnos hacia el infinito también nos gusta recorrernos todos los rincones y escondrijos cercanos.

Almagro (Castilla la Mancha)
Casa Rural Tia Pilar
















Nuestra habitación






Plaza mayor de Almagro




Haciendo el payasete con un camarero simpático




Callejeando por la ciudad

Mi foto preferida de estas vacaciones









Castillo de Calatrava la Nueva (Aldea del Rey, Ciudad Real)


Tuvimos que ir un par de veces al castillo para poder hacer la visita guiada,
pero merece la pena que te lo enseñen con tanta devoción












Embalse La Colada (Córdoba)









Merienda en la Colada





El pueblo de la yaya







Y fin!!